En el campeonato 1985/86, el primero después de las temporadas divididas entre Nacional y Metropolitano, Ferro terminó sexto -nada mal- y San Lorenzo, séptimo. En el partido de ida, en cancha de Boca, San Lorenzo ganó 2-0 con goles de un futuro técnico de Ferro: Walter Perazzo. Ferro se lo cobró en la vuelta.
El 16 de marzo se encontraron de nuevo los dos en Caballito. Y el equipo de Timoteo le pegó a San Lorenzo un baile de aquellos: 4-0. Daniel Fernández, Carpecho, fue el autor del gol que cerró la cuenta: el tiro cruzado que se ve en la imagen, venciendo a un José Luis Félix Chilavert de apenas 21 años.
Perazzo también fue protagonista en esa revancha, porque a los 5 minutos de juego, Pipo Tursi le atajó un penal. Pero la gran figura de la cancha fue Esteban González, luego campeón con San Lorenzo, autor del primero y el tercero de esa tarde; además, el árbitro Juan Carlos Loustau expulsó al Gallego por molestar a Chilavert cuando estaba por sacar del arco.
El tercer gol de lo hizo Oscar Acosta, de penal. Ferro entraría ese año a la Liguilla Pre-Libertadores.