La nuestra es la cancha en la que más partidos se jugaron desde el nacimiento del profesionalismo: además de Ferro, en ella han sido locales 23 equipos distintos, desde Argentinos Juniors y Vélez -los que lo hicieron más veces- hasta los cinco grandes. ¿Pero qué paso cuando fue Ferro el que tuvo que dejar Caballito y salir a buscar otro estadio? Una investigación de LaFerropedia muestra que eso ocurrió en 53 oportunidades desde 1931 hasta hoy, en la A y en la B.
La cancha más usada por Ferro como alternativa ya no existe: el viejo Gasómetro de avenida La Plata. Ese estadio, donde jugaba San Lorenzo, está a 39 cuadras del Templo de Madera. Ferro fue local ahí en diversos períodos en todas las décadas del siglo pasado, hasta que el Gasómetro se convirtió en un supermercado y San Lorenzo optó por ser local en Ferro hasta que construyó su cancha actual.
El segundo estadio más usado también es vecino: el José Amalfitani. La última vez fue en 2000, con un equipo descendido que perdió 3-0 con un River campeón. Si se suma el antiguo estadio de Vélez, el Fortín de la calle Basualdo, en Villa Luro, justamente Vélez es el club que más veces le alquiló la cancha a Ferro.
Después vienen Boca y River, contando el Monumental y la antigua cancha de la avenida Alvear.
Más atrás en la lista aparecen Atlanta y Huracán. En el León Kolbowsky, de Atlanta, se jugaron en 1983 los 15 minutos de un partido que se había iniciado en Ferro y se suspendió por la agresión a un línea; Ferro llegó de Caballito ganando 1-0, Racing empató en Villa Crespo y esa igualdad privó a Ferro del campeonato Metropolitano.
En ese mismo torneo, ocurrió una cosa curiosa en la fecha 37. Boca tenía la cancha suspendida y fue local contra Huracán en Caballito. Y Ferro se tuvo que mudar a Atlanta para recibir como local a Unión (Santa Fe).
La primera vez que Ferro resignó la localía en Caballito desde el nacimiento del profesionalismo fue en la fecha 4 del torneo de 1931: puntero, recibió a Boca en Boedo, empezó ganando y perdió 2 a 1. La última, en la B Nacional de 2014: 0-1 con Argentinos Juniors en cancha de Huracán.
La localía geográficamente más lejana fue el Reclasificatorio de 1968, un 1-1 con Platense. Se jugó en Banfield, a 18 kilómetros del Templo.