A una semana de que se largara el Metropolitano de 1981, Ferro fue a Vicente López a jugar un amistoso contra Platense. El equipo venía de zafar del descenso el año anterior, estaba recién vuelto de la pretemporada y se preparaba para darle forma al ciclo más exitoso de la historia del club, empezando por el subcampeonato en ese mismo torneo que estaba por iniciarse. Pero en el amistoso no le fue bien: 0-3.
En la planilla del partido se lee que Eduardo Oviedo marcó 2 goles para Platense y que Ramón Bóveda hizo el otro. También se ve la fecha y la hora del partido 14 de febrero de 1981 a las 17:30. Y que el árbitro fue Jorge Vigliano. La planilla fue completada por Carlos Cereza, entonces dirigente de Platense.
En el equipo de Timoteo, la defensa y el mediocampo son los que se repetían de memoria. Con la camiseta 7 aparece Héctor Horacio Scotta, que había llegado el año anterior como gran refuerzo y rindió mucho menos de lo esperado. El Gringo no jugó, finalmente, ese torneo para Ferro: regresó a San Lorenzo.
Claudio Crocco, que sí fue el delantero titular, estuvo entre los suplentes. Con la camiseta 9 figura en la planilla el pibe Márcico, que sumaba ya 10 partidos en Primera. Y con la 10, Apariente, que terminaría el año en Huracán. Con la 11 salió Miguel Juárez, que jugaba contra su ex club en lo que puede haber sido su primera vez con los colores de Ferro.
Otro detalle curioso en el banco: Juan Carlos Ocampo Rodríguez. En la columna con los números de documento, a la izquierda, dice «CIU»: es la cédula de identidad uruguaya. Era un delantero surgido de Danubio, que entonces jugaba en el Recreativo de Huelva (España) y estuvo -sin éxito- a prueba.
El 15 de agosto siguiente, Ferro volvió a jugar con Platense como visitante (en Atlanta). Y, por los puntos, el resultado fue el mismo, pero a favor de Ferro: 3-0, con goles del uruguayo Jiménez, Mario Gómez y el Burro Rocchia.
Colección Daniel Cereza