El Grupo 1 de la Libertadores de 1983, integrado por equipos argentinos y chilenos, fue el más parejo de los cuatro que entonces había en la rueda de clasificación de la Copa. En los partidos de ida, Ferro -campeón del Nacional 82- y Estudiantes (La Plata) -campeón del Metro- perdieron sus dos partidos con Colo Colo y Cobreloa. En la vuelta, ganaron y llegaron a la última fecha en condiciones de definir entre ellos el único clasificado a la fase siguiente.
Estudiantes y Ferro habían empatado 0 a 0 en La Plata el 17 de marzo. La revancha se jugó el 8 de junio, una noche helada en Caballito. Esa misma tarde, Cobreloa había derrotado a Colo Colo. Todavía se daban dos puntos por victoria. Si Ferro ganaba, clasificaba... Y empezó ganando, con gol del Gallego González, pero terminó perdiendo con dos goles de Sergio Gurrieri.
En ese partido se inauguraron los palcos de prensa que estaban sobre la platea de madera y se acondicionaron los palcos actuales, arriba, en la platea de cemento. Para el estreno, se ofreció a los periodistas un programa como el del cine. Tenía los planteles de los dos equipos enumerados según la lista de buena fe para la Copa -con un jovencísimo Fabián Cancelarich como tercer arquero- y noticias varias; entre otras, la celebración del Sudamericano de básquet, en el que Ferro defendería su condición de campeón.
Ferro volvería a la Libertadores en 1985.