El campeonato de 1934 tiene una particularidad: Ferro recibe la mayor cantidad de goles desde su ascenso a primera división, en 1912. Nada menos que 100 en 39 partidos, un promedio de 2,5 por presentación. En esa temporada, el equipo termina penúltimo.
La delantera tampoco era muy eficiente. Anotó solo 51 goles. El único equipo con peores registros fue Argentinos Juniors, que se fue a la B.
Pero el mediocampo de Ferro tenía su fama. Y la revista Alumni le dedicó este póster.
El half izquierdo, Hortensio Pellizari, fue quien tuvo una carrera más corta, que terminó con unos pocos partidos en Vélez y Huracán, aunque fluida en la noche. El central, José Volante, venía de sufrir una grave lesión jugando para Lanús, donde terminó siendo presidente. Del half derecho, Agustín Chapuis, las crónicas de la época lo destacan como un jugador de enorme calidad.
Al año siguiente, Ferro levantó la puntería. Salió octavo y cumplió la que fue su mejor campaña hasta entonces.