El 26 de octubre de 2014, Ferro perdió 3-1 con Instituto (Córdoba) como local. Pudo haber sido un partido cualquiera; otra derrota con otro director técnico que fracasó, en un torneo que regaló ascensos y nosotros dejamos pasar. Pero no: fue el último partido con los tablones de la tribuna local. La última vez que entramos por la puerta de Avellaneda, que subimos los escalones de madera y que alentamos desde ahí. El 2 de agosto del año siguiente, empezó el desmonte completo de esa tribuna, que algún día reemplazará una nueva, de cemento.
Para nadie será lo mismo. Esos tablones estaban desde 1938. Hay un documental hermoso que cuenta la historia.
Ahí vimos a Ferro salir campeón dos veces. Debajo de los tablones estaban aquellos juegos y más atrás, la cancha auxiliar. Los buzos Topper, la publicidad de Coca Cola... Otra época. Esta foto de Tiempo Argentino rescata esos días de gloria. Corría 1985 y Ferro se estaba preparando para jugar por la Copa Libertadores.
Con la pelota bajo el brazo, quien dirige la práctica es el profesor Luis Bonini, colaborador histórico de Timoteo, uno de las claves de aquel equipo. En la imagen se distinguen los rulos de José Fantaguzzi, de espaldas, y los de Víctor Marchesini, de frente; a la derecha del profe, aparecen Oscar Acosta y Oscar Agonil.