Empleado ferroviario y de los primeros socios del club, jugó también en los torneos de Segunda División previos al primer ascenso a Primera

También fue jugador de cricket, integrando con Edward Wickers y otros un equipo que fue campeón de Tercera División en 1911 (colección Pablo Kersevan y Los Primeros 75 años, Club Ferro Carril Oeste)
En algún momento jugó con pantalones blancos largos y holgados y sus compañeros lo bautizaron Calzoncillo (Revista F.C. Oeste, julio de 1954). Retirado, trabajó como maquinista del Ferro Carril Oeste (Revista F.C. Oeste 1, mayo de 1929)
Su hijo Mario fue jugador del club entre 1937 y 1939